Si intentamos rastrear el origen del cómic, necesariamente atraerá nuestra atención un momento muy peculiar de la Historia del Arte, cuando el mundo estaba ya cansado de lo que se entendía como «arte oficial«.

Simultáneamente en Inglaterra y Estados Unidos, a fines de los 50´s surgió el Pop Art. Se nombró así a un conjunto creciente de imágenes y representaciones, surgidas en los nuevos medios de comunicación, que adquirían un papel cada vez más relevante en la cultura urbana de masas de la época. Las imágenes del ámbito de la publicidad, la televisión, el cine, los cómics en general, se transformaron en los nuevos temas que los artistas explotaron.

La finalidad del Pop Art parecía consistir en describir todo lo que hasta entonces no había sido digno de atención y todavía menos propio del arte: las ilustraciones de los comics, los muebles hechos en serie, los vestidos, las latas de conservas, etc. Los tabús del arte se rompieron una vez más. Para el Pop parecían mejores las cosas cuanto más baratas y comunes fueran.

El Pop Art estetizó las imágenes populares. Construyó un lenguaje artístico nuevo, cimentado en técnicas muy ligadas a las de la misma producción industrial, para elevar esas imágenes a la categoría de arte. En este movimiento se “glorificaron” los nuevos objetos, los nuevos símbolos producidos por la industria: coca-colas, tazas, vasos, pistolas, máquinas …, extraídos del panorama de objetos de uso cotidiano que nos envuelven, e iconos coloreados o dibujos al estilo cómic de imágenes populares de consumo masivo. Como los temas y formas del Pop Art eran de fáciles y divertidos, y su contenido más superficial podía ser captado sin dificultad, el Pop Art fue apreciado y aplaudido por un público encantado de reconocer objetos corrientes en los cuadros, evitándose el esfuerzo que representaba interpretar las obras del expresionismo abstracto.

Técnicas del Pop Art

Al inspirarse en las imágenes de consumo masivo, el Pop art va a utilizar también las técnicas de producción en serie. Los artistas Pop se apropian de éstas técnicas de factura comercial. Algunos autores que al inicio pintaba sus cuadros, después va a usar la serigrafía como medio de expresión. Esto le permitía confiar a otros la ejecución de sus obras. El artista Pop no se preocupa por inventar imágenes, solamente se apropia de ellas y las pone en circulación.

Regularmente, para imprimir los objetos publicitarios se recurre a una separación de tintas, es decir, depende del número de tintas que tenga el diseño, será las veces que pase a través de la máquina de impresión, cada tinta eleva el costo de producción. Generalmente los diseñadores utilizan técnicas diferentes para recurrir a la menor cantidad de tintas y así no encarecer el costo final del producto.
Estas mismas características van a pasar al Pop Art, cuando los artistas se inspiran en imágenes de consumo masivo.

Observa detenidamente el siguiente acercamiento. Las tramas tonales son superficies hechas con puntos de diferente tamaño que, al utilizarlos en mayor o menor saturación, producen diferentes texturas visuales.
Se llama ashurado al conjunto de líneas paralelas que a la distancia se perciben como una tonalidad diferente según su cercanía.
Por ejemplo, si se tiene la imagen de una persona con vestido rojo, por medio de una trama tonal o un ashurado, puede resolverse el rosa de la piel del personaje, sin tener que pasarlo otra vez por la máquina de impresión y así reducir los costos de impresión.

Características del Pop Art

Como ya vimos,  el Pop Art se apropia de las técnicas expresivas que el consumo promueve como por ejemplo, la serigrafía.

La utilización de colores planos e intensos contribuye a la simplificación y fácil identificación del objeto, propio de la comunicación visual de la publicidad. Lo mismo puede decirse del estilo claro y preciso del dibujo como configurador de la forma.

Las enormes dimensiones que alcanzan a veces los cuadros y esculturas reproducen la búsqueda de un efecto espectacular.

El artista pop no duda en explotar todos los mecanismos de producción de imágenes populares, ya sea la fotografía, la publicidad, el cine, el cartel, las revistas ilustradas, el cómic, etc. En las obras mixtas, estas fuentes se combinan y complementan.

Los temas pictóricos del «Pop Art» están motivados por la vida cotidiana, reflejan las realidades de una época y refuerzan el cambio cultural. La Coca-Cola, los Helados, Seven-Up, la Pepsi-Cola, la Pasta de dientes, la Sopa Campbells, los Cigarrillos….se convierte en la iconografía del «Pop Art».
Su lenguaje pictórico consiste en estereotipos de héroes populares: Marilyn Monroe, James Dean etc.

El Pop elimina al máximo la expresividad subjetiva del autor y fomenta una despersonalización de la obra.

Algunas de las imágenes del Pop se repiten una y otra vez en ampliaciones fotográficas impresas. La única modificación es una capa de color sintético, crudamente aplicada. La repetición y el color son algunos de los recursos más empleados.
El arte pop muestra la realidad existente -el capitalismo triunfante- a veces con entusiasmo y a veces con ironía o escepticismo, a veces en serio y a veces en broma.

El Pop Art recupera la tradición del arte figurativo, que había sido arrinconada por el triunfo de la abstracción.

Principales Exponentes del Pop Art

Andy Warhol y Roy Liechtenstein figuran como los pilares del Pop Art. Además de ellos, otros artistas se anexaron a la corriente como Robert Rauschenberg, Claes Oldenburg, James Rosenquist, Tom Wesselman y Peter Phillips entre otros .
La historia del arte clasificará a estos artistas en dos grandes vertientes: La Escuela de Nueva York y el grupo de California. Pese a esta división de carácter aparentemente geográfico, algunos autores ingleses quedan incluidos también dentro de éstas categorías.